sábado, 19 de enero de 2008

ELUCUBRACIONES SOBRE UNA FOTOGRAFIA EN DESUSO

ELUCUBRACIONES EN TORNO A UNA FOTOGRAFIA EN DESUSO.
Por: Javier Castaño Vera Comunicador Social-Periodista
VIEJAS NUEVAS FOTOGRAFIAS:
Las imágenes en tonos pasteles, rodeadas de atmósferas suaves y oníricas, con grano extremadamente grande y bordes "soft" caracterizan los desnudos impúberes de las modelos adolescentes de DAVID HAMILTON.
Fotografías en ambientes nórdicos, donde el horizonte se pierde en una falta de resolución manipulada con el fin de crear una atmósfera sensual, nos recuerdan las primeras imágenes de MAN RAY, que se caracterizaban por efectos especiales aplicados a la imagen análoga a partir de negativos en medio formato y en imágenes en blanco y negro, entre los cuales destacamos la acentuación del aluro o grano de plata del medio fotosensible, a través de la sub-exposición de la película y un sobre revelado del material fílmico, con el fin de crear una textura irregular.
Este efecto retomado por Hamilton, y acompañado con el trabajo de las atmósferas y ambientes poco contrastados, en colores pálidos y tonos pasteles, regresa el aura de las fotografías del desnudo femenino en su edad pre-adolescente, para lograr imágenes de perturbador impacto en el espectador, que las hace inolvidables e inquietantes.
"La capacidad lírica de un tipo de imágenes visual, ò la intensidad de los efectos que ella es susceptible de producir, su "impacto", varia con el tiempo"
Con esta premisa, re-surge David Hamilton, como fotógrafo contemporáneo, aceptado e imitado, y con aquellas imágenes que nuevamente tocan el "aura" como concepción mágica de la imagen
¿Quién ES?
El fotógrafo ingles David Hamilton (Londres, 1933) saltó a la fama gracias a sus retratos de niñas adolescentes semi desnudas. Su obra vaporosa y sensual, marcó una época y creo tendencias, especialmente hacia los años setenta y principios de los ochenta. A pesar de no tener permanencia dentro de la crítica (fue desterrado de la memoria de los hombres en la última década del siglo pasado), con el paso del tiempo fue reivindicado y su universo estético retomó el rumbo abandonado, y su estilo fluo, que envolvía sus imágenes soleadas e ingenuas, fueron nuevamente visualizadas e imitadas por fotógrafos y productores de cine en estos primeros años del siglo XXI.
Las fotografías aquí expuestas, han sido seleccionadas de las innumerables imágenes publicadas por Hamilton en el Álbum de Bilitis algunas ilustran temas que la película no logró desarrollarlas, otras, sencillamente son de mi gusto y preferencia, por su acabado final, textura y sensualidad.
¿REINVINDICADO?
La realizadora Sofía Coppola, en su primer largometraje, "Las Vírgenes Suicidas" recreaban en parte el universo estético de Hamilton, y después, muchos artistas han reivindicado el talento de Hamilton, caracterizado por su filmografía: "Bilitis" (1977), "Laura, las sombras del verano" (1979), "Tiernas Primas" (1980) – que se apreció en Colombia en los teatros de cine X, pasando sin pena ni gloria entre los espectadores más aberrantes- "Primeros Deseos" (1983) y "Un Verano en Saint Tropez" (1984); Cinco pequeñas obras maestras repletas de ninfas preadolescentes y colegialas inquietantes, que dejan huella en los espectadores.
Las locaciones empleadas por Hamilton para enmarcar sus fotografías se replegaron a un rincón de la Provenza, cerca de Saint Tropez, por exigencia del autor y en la búsqueda se ese encanto que imprimía en su palacio el pintor Balthus
Las adolescentes son redundantes en la obra de Hamilton, pues este nunca se cansaría de fotografiarlas. Las telas transparentes de tonos suaves y colores pasteles definitivamente rompen con cualquier intento de crear imágenes ostentosas, llamativas y contrastadas, en un mundo de ensueño sensual, características inocultables del lenguaje visual de Hamilton.
UN SUPUESTO:
Para la exposición de las obras fotográficas de Hamilton, bien se podría seleccionar la casa Ditaires, ubicada al sur del Valle de Aburra, a 10 kilómetros de Medellín y cuyos salones inmensos, de estilo republicano, bien podrían replicar la atmósfera buscada afanosamente por Hamilton en Saint Tropez.
Fotografías sin marco y en gran formato (70 x 100 cms), ubicadas en el piso, apoyadas en la pared, de tal manera que el espectador baje el rostro para apreciarlas, iluminadas con luz directa y tono calido, enmarcada con la banda sonora de la película e interpretada magistralmente por Francis Lay, en reproducción digital como ambiente sonoro a bajo volumen, susurrando musicalmente una atmosfera intimista.
BIBLIOGRAFIA CONSULTADA Y RECOMENDADA:
Debray, Regis, VIDA Y MUERTE DE LA IMAGEN. Ed. Paidos Barcelona 1994
Hamilton, David. EL ALBUM DE BILITIS. Ed. Blume Barcelona 1982
Vélez S. Gabriel Mario. LA FOTOGRAFIA COMO DISPOSITVO MÀGICO. Ed. Universidad de Medellín, 2006

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